Durante los últimos 25 años la Fundación Provincial de Artes Plásticas Rafael Botí ha desarrollado un ambicioso programa de apoyo a las artes visuales. Una de sus principales líneas de actuación, en este sentido, ha sido la adquisición de obras de arte para su colección. Heredera del papel preponderante que las Diputaciones provinciales tuvieron en el fomento de las artes visuales desde mediados del siglo XIX, la Fundación Botí refuerza hoy su labor de mecenazgo para cultivar una escena artística que se ve azotada por severas dificultades. Entre ellas, la precariedad estructural del sector creativo, siendo los propios artistas que le dan sentido a toda la cadena los más afectados, y la degradación del patrimonio artístico contemporáneo, que amenaza la conservación de obras y testimonios de la modernidad.

Como consecuencia de ello, la Fundación Botí orienta su reciente política de adquisiciones con un doble objetivo. Por una parte, a través de la Bienal de Artes Pláticas Rafael Botí adquiere mediante convocatoria pública obra de artistas, que con independencia de su origen, desarrollan una importante carrera con resonancia en el contexto artístico nacional. Por otro lado, incorpora a través del mecanismo de la bolsa de compra obras de artistas vinculados a la provincia de Córdoba, por nacimiento o residencia, conformando con ello la más importante colección de arte cordobés contemporáneo.

Del encuentro de ambos estilos de coleccionar, surge una selección de obra singular y aristada, pero llena de resonancias y vasos comunicantes. A parte de las temáticas y los imaginarios compartidos en torno a la naturaleza muerta, la ciudad o el cuerpo, aparece en este encuentro inesperado de piezas una constante búsqueda del límite, y una idea de la creación artística como algo frágil, maleable y lleno de incertidumbres. Por eso, en la exposición abundan elementos suspendidos, conceptos cargados de polisemias, formas híbridas y materiales que parecen consistentes y quebradizos, a la vez. Para ofrecer una descripción general del conjunto quizá debiéramos hablar de una panorámica del arte en tiempos póstumos, donde los artistas abandonan toda certeza para adentrarse, con una mezcla de inseguridad y fascinación, en los resquicios de una prácticacada vez más misteriosa.

La Fundación Botí ofrece al conocimiento público con esta exposición las adquisiciones realizadas a artistas cordobeses y cordobesas en los últimos cinco años, una muestra fragmentaria pero significativa del arte producido en nuestra provincia en el tránsito entre dos siglos.